martes, 25 de mayo de 2010

Misiones en la Iglesia

Estudios Prácticos de las Misiones
Por Dr. Stinnett Ballew

Capítulo Nueve

En este capítulo estudiaremos las misiones de una vista práctica. He encontrado que los misioneros necesitan mucha ayuda en las cosas prácticas. Veremos el entrenamiento, las misiones, la deputación, saliendo de su pueblo e iniciando una obra nueva en el campo misionero. No soy un experto en esa área, pero aprenderemos de las enseñanzas de la Palabra de Dios, la enseñanzas y consejos de otros y de lo que he aprendidio por experiencia.

El Entrenamiento

Una cualidad de un hombre de Dios es que “no un neófito, no sea que que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo.” (I Timoteo 3:6). Ese versículo significa que un hombre jovén, sin experiencia, y sin entrenamiento no debe tener una posición de autoridad ni responsabilidad en el ministerio. Su entrenamiento debe empezar en su iglesia local bajo la dirección de su pastor. Personalmente yo no creo que una iglesia local debe mandar a un misionero de su iglesia hasta que ha servido al Señor fielmente cuatro años en su iglesia local. Él podría ser un profesor de Escuela Dominical, un director de jovenes, un obrero de las rutas, o asistente del pastor. ¿Por qué alguién debe pedirme que apoye a un misionero a hacer la obra de Dios en un campo misionero si no ha trabajado en su iglesia local? Una luz que no brilla en una iglesia local, tampoco brillará si le mandas a otro sitio.
La mayoría de las misiones requiere que sus misioneros estudien en un Instituto Biblico o un seminario. Eso definitivamente debe ser un requisito pora un jovén sin experiencia. Por lo tanto, si un hombre tiene 10 años o más experiencia como pastor, su experiencia personal puede ser un sustituto por sus estudios. La habilidad y estabilidad del misionero es un factor importante en determinar si es preparado para servir como un misionero. Debemos tener cuidado de las misiones que mandan hombres que no son preparados al campo misionero para tener más misioneros con su misión. Un llamado para servir debe ser reconocido como un llamado a prepararse a si mismo por el servicio en que Dios nos ha llamado.
Si sientes que Dios está llamandóte a ser un misionero, debes hablar con su pastor. Debes buscar su consejo en cuanto al trabajo preparatorio que puedes empezar en su iglesia local. Después debes buscar el consejo de tu pastor y otros líderes para ver a que seminario debes asistir.

Las Misiones

Algunos pastores no quieren que su misioneros sean afiliados con una misión. Ellos quieren que su iglesia local manejen todas sus finanzas y papeles del misionero. No voy a discutir ese punto, pero quiero decir que estoy de acuerdo con las misiones (Agencias Misioneras, Agrupaciones Misioneras) por las siguientes razones:
Los Argumentos a Favor de las Misiones

Muchos pastores no saben el trabajo preparatorio que un misionero debe hacer para ir al campo misionero. Eso quiere decir, la mayoría de los pastores no saben cosas como ¿que preparación médica necesita un misionero antes de salir al campo misionero? ¿Qué papeles necesita un misionero antes que vaya al campo misionero? ¿Cuándo necesita una visa y como puede obtenerla uno? ¿Qué requisitios hay del gobierno extranjero que requiere el misionero que quiere empezar una iglesia? ¿Cómo puedes manejar los problemas legales en otro país? ¿Cuánto dinero necesitará el misionero y su familia para vivir en otro país y llevar acabo la obra que Dios le llamó para hacer?
Otra razón que estoy de acuerdo con una misión es que la mayoría de las iglesias no tienen secretarias suficientes para manejar las finanzas de los misioneros, especialmente si hay más que un misionero de la iglesia. La mayoría de las secretarias de las iglesias y los pastores no tienen conocimiento de los impuestos del misionero.
Yo creo también que la misión es un instrumento de reconocimiento por los pastores y los misioneros. Si un pastor sabe la reputación de la misión, entonces él podría saber muchas cosas acerca del misionero. Por supuesto un misionero no estará con una misión si no está de acuerdo con sus principios y prácticas. La mayoría de las misiones examinan sus misioneros intensivamente antes que le acepte. Eso significa que si un misionero está con una misión con una buena reputación, la misión ha examinado sus doctrinas, su estado marital, y su plan de servicio cuando llega al campo misionero. Cuando un misionero llama a un pastor por una cita en su iglesia, quizás el pastor no conoce al misionero ni a su pastor. Si un misionero puede decir estoy con tal misión y el pastor si conoce la misión, esto puede ayudar el misionero tener reconocimiento. Si un misionero esta con una misión que el pastor sabe que no está de acuerdo con algunas áreas él podría hablar con el pastor del misionero para preguntar acerca de esas áreas dónde él tiene inquietudes.
Otra razón porque un misionero debe estar con una misión es para contabilizar. Algunos dicen que los misioneros no tienen que dar cuenta a las misiones. En lo que he visto, he visto más cartas de las misiones en cuanto al comportamiento inapropiado de los misioneros que he visto de los pastores de sus iglesias locales.
Un pensamiento final, la mayoría de los misiones tienen un fondo para emergencia para los misioneros si tienen que salir del campo misionero . Ese sería muy dificil para algunas iglesias pequeñas.

Los Argumentos Contra Las Misiones

Ahora veremos algunos argumentos contra las misiones. Yo creo que el problema más grande con la misión es cuando la misión quiere tomar la posición de autoridad de la iglesia local y la del pastor. Esto es especialmente verdad cuando una misión crece en una organización grande. Una misión debe ser una ayuda a la iglesia local para mandar su misionero al campo misionero. Aunque las misiones tienen sus reglas, doctrinas, y prácticas, ellos deben reconocer que no son la autoridad final de la misión.
Otro argumento que hay contra la misión es cuando la misión cobra a sus misioneros por los servicios dados al misionero.
Levantando fondos por los que trabajan en la oficina de la misión y comprando equipos nuevos para la misión no son problemas nuevos. Es un problema más grande con la necesidad de computadoras y otros equipos que cuestan mucho pero son necesarias para operar una oficina. También el sueldo de los que trabajan en una oficina tambien añade a los costos de la oficina. Cuando pienso en eso, quizás la cosa más facil es para cobrar a los misioneros por los servicios de los que trabajan en la oficina. Aunque eso parece la manera más facíl para levantar fondos, eso DESTRUYE EL PRINCIPIO DE MISIONES DE FE.
Yo creo que la razón número uno del crecimiento de los Bautistas Independientes en los últimos años es que nuestro programa de misiones es totalmente una obra de fe. No éstabamos satisfechos con la manera en que las misiones de las denominaciones estaban usando nuestro dinero para misiones. Estaban pagando por las operaciones de su misión y solamente unos pocos centavos eran mandados a los misioneros. El resultado de eso es que muchos han dejado la convención y empezaron misiones en las Iglesias Bautistas Independientes para ser totalmente una obra de fe. El problema con las misiones de las denominaciones era que ellos usaron un porcentaje grande del dinero para los misioneros para financiar sus propios deseos en vez de apoyar a los misioneros. Ahora muchos de los bautistas independientes están empezando hacer las mismas cosas. ¿Si una mision puede cobrar 5% de su apoyo para cubrir los servicios de la misión, como sabes que no aumentará a 10%, 25%, o 50%?
¿Cuál es la respuesta a este problema? Cada misionero debe asumir la responsabilidad de dar una ofrenda cada mes a su misión para cubrir los gastos a los servicios dados a él. También cada iglesia local debe apoyar la misión y a las personas que trabajan allí regularmente. ¿Si la misión está ayudando a la iglesia local, ¿cuál es el problema en ayudar con sus gastos? Muchas misiones han desanimado a las iglesias locales de apoyar la misión porque están gastando mucho dinero en comprando o construyendo edificios grandes que no son esenciales para llevar acabo la obra de misiones.
Otro problema que hay con las misiones es que a veces ellos desarrollan una actitud que son más santos, que son mejores que los demás. Eso empieza con un espirítu de competición en sus misioneros con misioneros que están con otras misiones, en vez de tener un espíritu de trabajar juntos y orar juntos para ganar a las personas a Cristo. No estoy hablando de un compromiso de doctrinas de la Palabra de Dios o sus principios de la fe. Estoy hablando de una actitud que dice, “No estás bien con Dios porque no estás con mi misión, entonces voy hacer todo lo posible para destruirte a ti y a tu ministerio.”

Escogiendo Una Misión

Como hemos visto en muchos otras áreas de las misiones, lo primero y la última cosa que debes hacer es ORAR. Es lo mismo cuando estás escogiendo una misión. Cuando estás orando, también debes consultar a tu pastor y pedirle que él ore contigo acerca del asunto. Debemos contactar varias misiones y pedirles su doctrina de la fe y una copía de sus reglas y prácticas. Debes estudiar sus reglas, preceptos, y los prinicipios de operación antes que decidas con que mision vas a estar. No debes estar en una misión que no tiene las mismas doctrinas y convicciones que tu tienes. NUNCA DEBES BAJAR TUS CONVICCIONES BÍBLICAS NI LOS DE TU PASTOR NI IGLESIA LOCAL PARA SER ACEPTADO POR UNA MISION. También debes hablar con los misioneros que están con la misión para ver como hacen las cosas. Debes compartir tu carga y tus preocupaciones con los lideres de la misión y esperar para ver como Dios te guía. NO DEBES JUNTARTE CON CUALQUIER MISION HASTA QUE TENGAS COMPLETA PAZ DE DIOS Y LA APROBACION DE TU PASTOR QUE ES LA VOLUNTAD DE DIOS PARA TI.

Extraido desde Evangelismo Mundial

lunes, 17 de mayo de 2010